lunes, 15 de diciembre de 2008

Ponche con piquete

La semana pasada arrancó el maratón Lupe-Reyes, que por haber tenido como ingrediente adicional a la final del campeonato mexicano de futbol tiene este lunes a docenas de personas como arañas fumigadas.
Sí, porque quien se precie de ser un fervoroso seguidor de esta competencia de resistencia que se prolonga hasta el mes de enero debe haberle hecho los honores a un partido de futbol tan importante como el que se jugó entre Toluca y Cruz Azul este domingo —cuyos comentarios me reservo nomás porque se me da la gana—. Fue, si me permiten, el pretexto perfecto para ponerse hasta la manitas, ya sea porque el Toluca resultó campeón o porque el Cruz Azul terminó derrotado o simplemente porque el equipo favorito de cualquier fulano de tal no estaba en la final.
Así que las hordas de aficionados que se dejaron llegar desde la nueve de la mañana a La Bombonera tuvieron tiempo suficiente para remojar su afición al futbol en cerveza y luego celebrar o lamentar a gusto el resultado del partido y del torneo entero. Después, bajo los efectos de las endorfinas propias del momento, se lanzaron a las calles a festejar el campeonato —incluso en el techo de autobuses—.
Y de ahí a las posadas hay una cruda de distancia. La de hoy. Si la dejan llegar, desde luego.
Las posadas, como todos sabemos, son un novenario donde se acostumbran las reuniones en las que todos rezan y cantan la letanía correspondiente, los niños rompen piñatas y reciben aguinaldos y los adultos departen alrededor de una olla de ponche caliente, a la que nunca le falta un alma caritativa que ofrece un ingrediente para combatir el frío que se resiente en estas tardes casi invernales: el piquete. Una sustancia mística sobre la que ni los más expertos se ponen de acuerdo sobre su composición o nombre comercial. Pero que es fundamental para que del 16 al 24 de diciembre la concurrencia mantenga el interés en el maratón y no ceje en su empeño de terminarlo.
Para ello desde luego que es fundamental que, como en este año, al 25 de diciembre siga un fin de semana como en el caso de este año. Lo que da un elemento providencial para continuar con las reuniones familiares y se dé el emplazamiento para las festividades de fin de año y naturalmente la cita para la rosca de reyes.
Y dar cumplimiento así como el maratón, para ir de fiesta en fiesta, contando desde luego con la colaboración de amigos, familiares y sonsacadores profesionales.

No hay comentarios: